Alicia contactó conmigo un día y me dijo que había dado a luz y que estaba interesada en hacerle unas fotografías a su hijo Fernando que acababa de nacer. Ellos no eran de aquí y debía ser lo más rápido posible. Por lo que nos pusimos manos a la obra.

Fernando, llegó al estudio acompañado de sus padres y de su hermana mayor. Lo desnudamos y lo dejamos con el pañal y con una mantita para que estuviera calentito (además de nuestra calefacción puesta para él) y Alicia comenzó a darle el pecho. Mientras tanto empezamos con la sesión. Comenzamos a disparar unas fotografías más intimas de ese momento de lactancia, y tras esto empezamos a integrar a los componentes de esta familia en las fotos.

Fernando después de esta parte, se espabiló un poco, aunque no lo suficiente como para que no quedara rendido de nuevo y comenzáramos las parte en la que el sale solo. Utilizando como soporte para poner al bebé una caja de madera (siempre recubierta con protecciones para que el pequeño no sufra ningún dolor y esté lo más cómodo posible).

Protagonismo compartido con su hermana mayor

Fernando es el miembro más joven de su familia, una familia conformada por sus papás y su hermana mayor, que no dudó en posar ante nuestros objetivos para este reportaje de fotografía de recién nacidos. Creo que es de las fotos que más pueden expresar en esta sesión, porque los hermanos mayores son los protectores y cuidadores de esos hermanos que acaban de llegar al mundo, y nos dejan fotografías tan tiernas como las que tenemos en la galería.

Tras esta parte, pasamos de nuevo a dejar al pequeño Fernando como único protagonista de la historia, y sacamos instantáneas tan preciosas como las que podéis ver metido en el cubito.

Creo que fue una experiencia muy bonita para todos y que los papás de Fernando se fueron encantados del estudio agradeciéndonos nuestra paciencia. ¡Nos encantan este tipo de sesiones! Esperamos que esta os guste también a ustedes.