REPORTAJE NEW BORN: curro
A la mamá de Curro le regalaron la sesión Newborn para su pequeño, ella se puso en contacto con nosotros con antelación y fijamos una fecha aproximada para dicha sesión. Tras explicarles todo lo referente a estas sesiones quedamos en terminar de concretar en cuando Curro llegara al mundo.
Llegaron al estudio temprano, con ropa fácil de quitar para el bebé y sin la toma dada ya que es importante que el sueño profundo lo haga aquí en el estudio. Es cierto que al principio Curro se durmió bien (aunque tenía mucho hambre), pero tras un ratito de sesión el pequeño comenzó a estar inquieto por lo que decidimos hacer las fotos de familia a ver si con sus papás se calmaba, y así fue.
Las fotos newborn suelen realizarse cuando el pequeño recién nacido tiene entre 10 y 12 días de vida, para que nos sea más fácil trabajar con ellos y nos den como resultado fotografías como esta, incluso antes si las circunstancias nos lo permitieran.
Curro ante sus primeras fotografías con nosotros
En las sesiones de Newborn pasamos de ver al bebé totalmente despierto a estar dormido. Hay veces, que el bebé está despierto, pero lo ideal es que durante la sesión el bebé permanezca dormido pues así las imágenes más tiernas y podemos trabajar con ellos fácilmente, aquellas en las que el pequeño aparece dormido, pues es en donde el fotógrafo se siente más libre para colocarle atrezzo o que duerma sobre espacios como sofás, cama, textiles…
Decidimos aplazar la sesión al día siguiente ya que curro estaba bastante inquieto y es que el pequeño tenía mucha hambre y no estaba alimentándose lo suficiente y por eso estaba tan nervioso. Ante eso ¿qué hicimos? Decirle a Pilar y Dani, los papás del bebé qué vinieran cuando el pequeño se sentara para terminar de hacer la sesión para su álbum. Ellos quedaron encantados y despreocupados, y sobre todo quitándose el mal sabor de boca de no haber podido terminar la sesión en el momento.
Aún así salieron fotos preciosas. Os dejamos con Curro y sus fotos Newborn.