Una temporada que nos obliga a hacer fotos de comunión en pleno verano, en una ciudad (que aunque estemos acostumbrados), es de lo más calurosa que puede hacer. Por eso, en este caso, Linda, la mamá de Daniela nos dijo que solo haríamos las fotos de Daniela en interior. Eso nunca ha sido un problema, y menos para nosotros, ya que contamos con una gran variedad de escenarios para que reportaje sea lo más diferente posible.

Daniela llegó una tarde al estudio acompañada de sus padres y de su hermana pequeña, la cual venía con tantas ganas como trata Daniela de hacerse fotos; lo que nos hizo la tarea mucho más fácil.

Tras cambiar a las pequeñas, comenzamos la sesión de fotos. En primer lugar con un escenario rosa con luces led en el que hicimos que Daniela se soltara en eso del posado, y no es que se soltara, es que podéis ver que no puede salir más espectacular en sus fotos. En algunas de estas instantáneas usamos como atrezzo un paraguas de encaje que hizo que las fotos fueran todavía más elegantes.

El segundo escenario es como podéis ver algo más sencillo y con ello podemos decir que elegante, en el colocamos una sola luz e hicimos que la naturalidad de Daniela hiciera el resto. En esta ocasión, sus padres (junto a su hermana pequeña) decidieron participar en algunas de las fotografías para que nuestra protagonista tuviera un bonito recuerdo de este día junto a su familia.

El tercero, fue todavía más simple y divertido, un columpio que hizo que nuestras pequeñas disfrutaran mucho haciéndose fotos y «peleándose» por ver quién de las dos se montaba antes.

Y para finalizar, pero no por eso menos importante, podemos ver un escenario iluminado con una luz tenue en una ventana. Como atrezzo, usamos una flor azul, uno de los colores favoritos de nuestra niña.

Daniela, una niña un tanto tímida, que llegó y nos deslumbró con sus dotes frente a nuestro objetivo

El de Daniela, es el primer reportaje de comunión de la temporada que hemos realizado en el estudio, y creo que con el que he disfrutado más editando pues ver el resultado de estos escenarios ha hecho recordarme que cuando las cosas se hacen con tanto amor y cariño, solo pueden hacer que te sientas orgulloso de lo que has montado y de los que te han ayudado a hacerlo (porque sin ellos, nada hubiera sido posible).

Sólo esperamos que disfrutéis de ella, tanto como lo hicimos nosotros el día de su reportaje y los días posteriores de edición. ¡Os dejamos con Daniela!