Sobre este pequeño poco tengo que deciros, llevamos haciéndole fotos desde que lo bautizaron, y siempre viene a vernos al estudio (ya sea para sesiones o no) con su mamá Mª del Mar. Este año, nos hemos quedado sin nuestras fotos de Semana Santa y de Feria, pero por supuesto no nos íbamos a quedar sin nuestra sesión de cumpleaños o smashcake. ¡así que teníamos que ponernos manos a la obra!

El primer año que Dario se hizo este tipo de sesión, la temática que elegimos fue de Mickey puesto que al pequeño y a nosotras nos gusta todo aquello relacionado con Disney; así que este año decidimos que la temática seria totalmente distinta. Entre su mamá y nosotros, buscamos todos los elementos que queríamos que en ella aparecieran y creedme que no fue fácil encontrar algunas cosas, pero es que Mª del Mar es una clienta/amiga que nos ayuda muchísimo en todo lo que puede con el estudio y no se le resiste nada, puesto que idea que tenemos idea que consigue que la llevemos a cabo.

Para la ocasión de su segundo cumpleaños, elegimos para nuestro pequeño algo veraniego puesto que nuestro protagonista cumple los años en el mes de Julio. Ataviamos nuestro escenario con un césped, un tipi, banderolas, hojas de arboles y osos, muchos osos. No podéis imaginaros su cara al ver el escenario, le encantó. Es cierto que ellos disfrutan muchísimos y en su carita tienen la marca de la ilusión con todo lo que conlleva el escenario que le hemos montado para ellos.

Dario, vestido con un peto celeste, del mismo color que su tarta que le hizo nuestra maravillosa Lorena (como siempre os decimos ¡no podéis imaginar lo buena que está!); le dió de beber a los osos, montó en nuestro caballito de madera y rió a carcajadas haciendo que nosotras nos derritiéramos de amor por cada instantánea que nos daba. Lo bueno de este tipo de sesiones es que ellos juegan y se lo pasan bien durante todo el reportaje, ya sea con o sin la tarta, disfrutan en todo momento de la sesión, algo que es de lo más gratificante.

Dario, mi pequeño bichito que se nos hace mayor

En todo momento Dario se mostró cómplice frente a la cámara (y eso que corríamos con el riesgo de que como está acostumbrado a estar en Aps Fotografía sin una cámara en la mano, se nos desmadrara un pelín. Pero para nuestra sorpresa hizo que la sesión fuera rodando), y nos dejó momento super graciosos y llenos de ternura. Como era de esperar en un cumpleaños, sopló su vela de cumpleaños con un 2, cantamos cumpleaños feliz, le dimos una cuchara para que comiera con las manos y con la misma, y por supuesto, disfrutamos muchísimo al ver el cambio de un año para otro.

Una de las características de las sesiones smashcake, de este reportaje de fotos infantil, es que tras la sesión, los niños tienen que ir obligatoriamente a la ducha, y en el caso de Dario no iba a ser menos.

Os dejamos con Dario, espero que disfrutéis de él como nosotros.