REPORTAJE DE PREMAMA: RAQUEL
Cuando nos enteramos que Raquel iba a ser mamá, no pudimos ponernos mas contentos y es que ya conocíamos a estos futuros papás de antes, puesto que ya le hemos hecho una sesión en exterior de pareja (Podéis verla en el apartado de Books).
Cuando hablamos de cómo le gustaría que fuera la sesión, me comentó que le gustaría que fuera algo distinto a lo que hicimos en el parque Oromana, algo más íntimo en estudio en las que se creara un entorno más acogedor. ¡Y qué gran acierto!
Llegaron con la misma ilusión de siempre, con las mismas ganas (o incluso más) de ponerse en nuestras manos para esta ocasión tan especial, y es la espera del pequeño Álvaro.
Nos gustaría recordaros que Raquel seguía siendo tan fotogénica como la primera vez que se puso delante de nuestro objetivo, así que poco tuvimos que hacer nosotros que no fuera poner las luces, indicarle cómo ponerse y disparar. Siempre estamos con la broma con su marido Joaquín de que no hay instantánea en la que Raquel salga mal.
Usamos como siempre fondo blanco, en esa parte de la sesión siempre nos gusta mostrar más naturalidad de las fotos, luz y sentimientos de felicidad y ternura. Sin embargo, cuando llegamos al momento de que el fondo negro sea el protagonista, comenzamos con la parte de la sesión más íntima.
Sólo podemos decir que nos lo pusieron muy fácil y que los sentimientos que hay entre los dos, hicieron el resto. Esa complicidad y adoración que tienen ambos el uno por el otro hicieron que salieran estas fotografías tan preciosas. También nos gustaría destacar que son una pareja que desde el minuto uno hubo una conexión y esa confianza hace que siempre sean ellos mismos sin importar que nosotros estemos ahí para captarlo.
Hay sesiones muy especiales, como también lo son esas personas
En ambos fondos, Raquel tuvo la oportunidad de lucir sola su barriguita y de mostrarnos el cuerpo tan bonito de la mujer embarazada.
Creo que poco más tengo que deciros sobre ellos, ya lo dijimos una vez, pensamos que es mejor que lo miréis por ustedes mismos. ¡Disfrutad de ellos, porque yo ya lo hice desde el día que aparecieron por la puerta la primera vez! Os dejamos con los futuros papás.